Los Peelings son técnicas médicas para la regeneración dermoepidérmica, que ayuda a la exfoliación natural de la piel, favoreciendo la eliminación de células muertas y promoviendo la regeneración celular al incrementar la producción de colágeno, mejorando la textura y uniformidad de la piel.
Hoy en día es la opción menos invasiva para mantener la piel sana, tersa a la vez que inhibe los efectos del envejecimiento, es el complemento ideal de mesoterapia o rellenos cutáneos.
La eficacia del peeling depende de múltiples factores como el conocimiento de la sustancia y las características de la piel a tratar.
Con el paso del tiempo y la exposición solar comienzan a aparecer manchas y se empieza a perder la unificación del color de la piel. Estos signos nos indican que estamos ante el inicio del envejecimiento y desgaste de nuestra piel. El peeling químico es un tratamiento médico que actúa con mayor o menor profundidad en nuestra piel, eliminando las manchas y disminuyendo las arrugas finas.
Además de suavizar arrugas finas y poros, el peeling aporta una mejora en la textura y uniformidad en la piel, llegando a eliminar de forma suave pigmentaciones alojadas en capas más superficiales de la epidermis.
PREGUNTAS FRECUENTES
Peeling significa pelar o decapar, con esto buscamos la renovación celular acelerada de las capas de la piel con diversos fines:
- Limpiar
- Nutrir
- Hidratar
- Rejuvenecer
- Despigmentar , etc
Esta importante exfoliación elimina las capas más superficiales de la dermis y nos proporciona:
- Luminosidad
- Piel de aspecto más joven
- Unificación del color de la piel
- Frescura
En las exfoliaciones superficiales, se utilizan AHA y BHA (Alpha-Hidroxiácidos y Beta-Hidroxiácidos), la mayor parte de estos son extraídos de frutas y cereales. En las exfoliaciones medias, el agente más ampliamente utilizado es el TCA (ácido tricloroacético) y en las profundas el Fenol.
Un peeling trata la morfología de la piel, ofreciendo resultados naturales y visibles desde la primera sesión. Es un procedimiento totalmente natural y eficaz, administrado por un profesional.
Es altamente recomendable que los pacientes utilicen un régimen de cuidado diario prescrito, para preparar la piel y obtener el máximo provecho del tratamiento. Lo ideal es iniciar el programa de cuidado diario de la piel por lo menos 2 semanas antes del peeling.
Una sesión dura entre 15 y 30 minutos y se lleva a cabo de la siguiente manera: limpiar, aplicación del peeling y la neutralización. Algunos peelings se llevan a cabo en series de 4 a 6 sesiones, que tendrán lugar en el transcurso de varias semanas.
La profundidad a la que podemos trabajar los médicos es muy superior a la que puede trabajar una esteticista, por lo tanto los resultados son muy diferentes, nuestros productos están preparados por laboratorios altamente especializados en el cuidado de la piel y con productos de uso exclusivamente médico, conociendo no solo el porcentaje sino otras variables como pH, buffer, etc que son importantes al momento de realizar un peeling.
Cuando se aplica el agente químico, notarás un ligero cosquilleo y una sensación de calor en la piel. Dependiendo del producto esta sensación varía y es pasajera, se calma inmediatamente con la siguiente fase del tratamiento.
No. Se indica y debe usar protector solar con pantalla completa, para no desmejorar los resultados conseguidos por el peeling.
Dependiendo de la intensidad del peeling, es posible observar una sensación similar a una quemadura solar leve, con leve descamación o descamación durante unos 3 días posteriores al tratamiento. El peeling químico ayudará a mejorar el aspecto de la piel, eliminando distintas capas de la epidermis, esto produce la renovación de las capas de la piel, haciendo que luzca más joven, con menos arrugas y aclarando las manchas.
Entre las sustancias más comunes que se usan en un peeling químico están; el fenol, ácidos glicólico, tricloroacético, ácido mandélico, glicólico, traxenamico, salicílico y kójico. La selección de las sustancias estará basada en el tipo de peeling que se realice, ya sea antiacne, antiarrugas, despigmentante. El principal objetivo de este procedimiento es mejorar la elasticidad de la piel, darle luminosidad y aumentar la producción de colágeno y elastina.
De acuerdo a la capa cutánea que afecte, su efecto va a variar, hay tres tipos de peelings químicos:
Peeling superficial: exfoliación de la capa córnea epidérmica. Usado para eliminación de la celularidad muerta de la piel, devolviendo la luminosidad y suavizando la textura cutánea. Es posible su realización en cualquier época del año (con las precauciones adecuadas) así como para preparación de la piel antes de otros tratamientos. La recuperación de la vida normal es inmediata. Está indicado para combatir las cicatrices originadas por el acné, cutis graso, arrugas leves. En este tipo de peeling químico principalmente se usa alfa-hidroxiácidos, ácido tricloroacético taponado, entre otras sustancias.
Peeling medio: Exfoliación de la epidermis completa y dermis superficial. Ideal para combatir arrugas leves, manchas solares, envejecimiento, cicatrices, poros muy dilatados con hiperqueratosis sebáce. Es un peeling más intenso y que genera una descamación a lo largo de una semana, y requiere de un tratamiento en domicilio a base de cremas regeneradoras dermoepidérmicas. Más indicado en épocas de poca exposición solar. La recuperación de la vida normal se produce en 3-4 días. Se emplean principalmente las sustancias en mascarilla de solución de fenol, solución de ácido tricloroacético y ácido tricloroacético. Este tipo de peeling también es utilizado como procedimiento previo en tratamientos como microdermoabrasión, lifting, etc.
Peeling profundo: diseñado para poder actuar de forma profunda ayudando a eliminar tanto arrugas superficiales, como las medias y profundas, queratosis, manchas solares, y también la flacidez. Las sustancias que se emplean son Baker-gordon, a base de fenol. Los resultados son muy efectivos.
Los peelings químicos son eficaces para combatir manchas, arrugas y marcas de acné, poros abiertos y cicatrices leves.
En la primera consulta se realiza una completa historia para determinar posibles contraindicaciones, y un diagnóstico para decidir el tipo de técnica y principios activos que necesita la piel.
Determinación de oligoelementos, en casos de pieles sometidas a factores ambientales o de estrés excesivo, para reforzar los posibles déficits.
Estudio cutáneo: Valoración, mediante diferentes técnicas diagnósticas y cuestionarios, del tipo de piel, para elaborar el tratamiento médico-cosmético adecuado para el tratamiento y para el futuro mantenimiento.
Tras el diagnóstico procederemos a la realización del peeling.
- Higiene facial y toma de fotografías de las zonas de tratamiento.
- Desinfección de la zona de tratamiento.
- Aplicación de varias capas de los diferentes agentes químicos (alfa hidroxiácidos…) en función del tipo de peeling y de la patología a tratar. En ocasiones estos agentes hay que neutralizarlos o bien se neutralizan solos (taponamiento)
- Limpieza y aplicación de tratamiento tópico (cremas exfoliantes selladoras, mascarillas frías regeneradoras dermoepidérmicas, descongestivas, fotoprotección solar…).
- Entrega de pautas de cuidado domiciliario y cita para la revisión pertinente. En algunos peelings, hay que mantener las sustancias aplicadas durante unas horas, y retirar en domicilio con agua y solución limpiadora.
No. No se requiere del uso de anestesia previa ya que es un tratamiento totalmente tolerable, el disconfort estará dado por la profundidad y es de escasa duración.
En los peelings se tratan los síntomas son leves y se tratan con tratamiento tópico de hidratación y fotoprotección solar. Evitaremos la exposición solar y fuentes de calor durante las primeras 48 horas.
En todos los casos, te indicaremos los cuidados específicos (limpieza, hidratación y nutrición, maquillaje…) que debes tener tras un tratamiento con cada peeling específicamente
Es un protocolo en función de los datos obtenidos en el estudio de la piel, en el que incluiremos un tratamiento de cremas médicas para uso diurno y nocturno, así como una fotoprotección solar adecuada. Es fundamental seguir un tratamiento médico-cosmético domiciliario adecuado, así como un seguimiento exhaustivo, para terminar de eliminar la hiperpigmentación residual, así como evitar la pigmentación.
Los resultados son visibles tras los primeros 3 ó 4 días de tratamiento, obteniendo un resultado óptimo a las dos semanas y con tratamientos repetidos, para la renovación programada y cíclica de la dermo-epidermis.
El número y tipo de peelings, irá determinado por un protocolo médico en función del tipo de patología a tratar y características de cada paciente.
Está contraindicado el tratamiento en los siguientes casos:
- Embarazadas o menores de edad.
- Intolerancia a alguno de los principios activos usados
- Enfermedad autoinmune
- Enfermedades Infecciosa activas.
- Herpes activo (profilaxis si hay antecedentes).
- Enfermedad psiquiátrica grave.
- Expectativas poco realistas sobre el tratamiento.
- Heridas en la zona de tratamiento.
- Medicación fotosensible.
- Valoración de fototipos altos por el riesgo de hiperpigmentaciones cutáneas.
Los peelings son tratamientos incluidos en la preparación de la mayoría de las técnicas de renovación cutánea, así como para mantener un resultado más a largo plazo.
La elección de un cirujano entrenado y atento a todos los detalles, reducirá la posibilidad de que se produzcan complicaciones y se minimicen complicaciones propias del tratamiento.
La información publicada por Ciares.com es puramente orientativa y destinada a entender de forma general en qué consiste un tratamiento en condiciones normales. Esta información NO se puede considerar en ningún caso como consejo médico. Solicite una consulta con el Dr. Jiménez Villarruel para más detalles.
